En el día de ayer, Lautaro Blengio, joven activista LGBT de Miramar, ha sido interceptado y secuestrado a punta de pistola por dos personas - las cuales se identificaron como policías de la localidad - y lo trasladaron al Vivero Dunícola Florentino Ameghino, mismo lugar donde la joven Natalia Mellman había sido abusada y asesinada dos años atrás.
Una vez en el Vivero, Lautaro fue encapuchado y torturado. Le propinaron golpes brutales, quemaduras con cigarrillos, cortes en sus brazos con navajas, le dibujaron una cruz en el pecho donde lo amenazaron de muerte al grito de “ahí te voy a fusilar”.

Es necesario una explicación urgente de estos terribles sucesos y una inminente respuesta de la justicia y de las autoridades municipales en pos de llevar tranquilidad al joven agredido, a su círculo familiar y a toda la comunidad en general.

También pedimos a nuestros gobernantes y a la Justicia de la Provincia de Buenos Aires, tanto como la Federal, un rápido accionar en propicio y defensa de los derechos humanos, y la vida en armonía de todos los ciudadanos de nuestra provincia y de nuestro país.
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